Toño Leña maldice a Figueroa Agosto

El reo por narcotráfico Ramón Antonio del Rosario Fuentes (Toño Leña) afirmó ayer, a su arribo al país procedente de Venezuela, que está metido en ese “lío” por un dinero que le habría prestado a un político al que no identificó.

En tanto, el fiscal de La Romana, José Antonio Polanco, declaró que Toño Leña será sometido a la justicia por un caso de diez kilos de cocaína, por doble identidad y lavado de activos provenientes del narcotráfico.
El lío al que se refiere Toño Leña es la persecución judicial de que fue objeto hasta el momento de su apresamiento, la semana pasada, por presuntamente liderar una red de narcotraficantes dedicada a distribuir y custodiar el bombardeo de drogas en el Este del país.
“Por un dinero que le presté a un político”, respondió el dominicano más buscado por narcotráfico, cuando le preguntaron sobre su vinculación con los cargos que ahora tendrá que enfrentar en los tribunales de La Romana. Dijo que se sentía bien, condición que reflejaba su semblante sereno, aunque estaba encadenado por brazos y piernas.
Sin inmutarse siquiera por el asedio de los periodistas que acudieron a la base aérea de San Isidro, por donde llegó a la 1:38 de la tarde, el reo se declaró totalmente inocente de las acusaciones que pesan en su contra.
Y a los que piensan que es socio y suplidor de drogas del prófugo José Figueroa Agosto, Toño Leña les dijo: “Yo no conozco a ese hombre del Diablo. Nunca lo he visto, a ese maldito hombre del diablo”, expresó con voz enérgica y visiblemente molesto.
Desde que se desmontó del avión matrícula N68DAS, Toño Leña lucía tranquilo. En ningún momento se le vio nervioso. Incluso, por ratos esbozaba una mueca que parecía sonrisa. Su estado anímico solo se perturbó cuando escuchó el nombre de Figueroa Agosto, supuesto capo puertorriqueño con quien las autoridades insisten en asociarlo y que el niega categóricamente.
Antes de abordar el vehículo que lo trasladó desde San Isidro a gran velocidad hasta la sede de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), Toño Leña prometió que próximamente revelará el nombre del político que asegura le debe dinero y contribuyó a darle la categoría del narcotraficante criollo más buscado de los últimos tiempos.
Rolando Mateo Rosado, presidente de la DNCD, y el jefe de la Policía Nacional, Rafael Guillermo Guzmán Fermín, fueron los primeros en desmontarse del avión militar.
Detrás de ellos, tan pronto descendió del avión, caminaba Toño Leña con un chaleco antibalas de la agencia antidrogas, un casco protector, también a prueba de balas, y con más seguridad que cualquier dignatario.
Hablan los jefes
Aunque fue apresado por las autoridades venezolanas, Mateo Rosado y Guzmán Fermín insisten en que el arresto de Toño Leña es un triunfo de ellos. “Podríamos tardar más o menos tiempo en capturar a los criminales, pero al final el resultado será siempre el mismo: apresarlos, ponerlos a disposición de la justicia y hacer que se cumpla su condena”, dijo Mateo Rosado.
Guzmán Fermín lo secunda. “Misión cumplida. Como bien dijera el general Rosado Mateo, nosotros, con una ardua labor de inteligencia, discreción y perseverancia, finalmente hemos hecho el trabajo”.
El Caribe